GALICIA
Dos gallegos especialistas en medicina subacuática formarán a pescadores senegaleses
La iniciativa, impulsada por la ONG Ecodesarrollo Gaia, cuenta con la colaboración de dos profesionales de la ONG Solidariedade Galega, que se desplazarán una semana a la localidad senegalesa de Yoff-Tonghor
El próximo sábado 3 de junio, dos especialistas en medicina subacuática, Salvador Fojón y Carlos García-Ramos, partirán desde A Coruña hacia Senegal para formar a pescadores locales en la prevención de riesgos laborales relacionados con la práctica del buceo. Los especialistas gallegos pertenecen a la ONG Solidariedade Galega que, en colaboración con Ecodesarrollo Gaia, realizan este año la tercera edición de este proyecto.
Allí impartirán, en la localidad pesquera de Yoff-Tonghor, un curso presencial interactivo que estará apoyado en material audiovisual y textos didácticos. Con él se pretende mejorar las condiciones de salud de los buceadores, instruyéndolos en las medidas de prevención de riesgos vinculados al buceo en apnea y con escafandra autónoma.
Para ello, los especialistas de Solidariedade Galega que participaron en las anteriores ediciones del programa elaboraron, tras la última expedición realizada en 2019, un libro que recoge la casuística específica de los buceadores senegaleses y las recomendaciones necesarias para practicar el buceo de un modo seguro y consciente. Este libro fue traducido a wolof, la lengua local que habla la población senegalesa pero en la que apenas existe material didáctico, resultando así un recurso de gran valor.
A la formación que impartirán este año Fojón y García-Ramos acudirán alrededor de 30 representantes de las distintas cofradías de pescadores que hay en la zona, quienes después trasladarán los conocimientos adquiridos al resto de sus compañeros. A día de hoy, se estima que en las zonas de Yoff, Ngor y Dakar hay cerca de 1.000 pescadores que utilizan el buceo como método para la obtención de su captura. En las dos anteriores ediciones del programa, se logró formar a cerca de 60 personas en esta materia, de las cuales el 92% carecía de formación y el 47% había tenido alguna vez un accidente buceando.
Las clases se realizan en la Escuela Coruña, un centro de desarrollo comunitario impulsado por Ecodesarrollo Gaia, que cuenta con el apoyo económico de la Diputación de A Coruña. Debido a la ubicación de esta localidad y a la tradición de sus habitantes, la pesca, el comercio y las industrias relacionadas con la actividad piscícola constituyen el sustento económico fundamental de su población, siendo el buceo una práctica en aumento en los últimos años debido a la creciente sobrepesca.
Sin embargo, el único aprendizaje que tiene esta población acerca de la técnica del buceo es por medio del boca a boca, habiendo una gran falta de conocimiento acerca de los riesgos y las graves consecuencias que puede provocar una mala práctica de esta actividad, así como falta del material necesario para desarrollarla con seguridad (profundímetro, manómetro, reloj y ordenador). Actualmente, existen en Yoff numerosos jóvenes con problemas físicos, principalmente de movilidad, causados por accidentes relacionados con el buceo, existiendo también algún caso de impotencia y varias personas fallecidas durante la actividad.
El salto de la pesca al buceo
En los últimos años, la sobrepesca y las malas prácticas de las flotas pesqueras industriales están agotando las pesquerías de las que depende la vida de muchos habitantes de África, por lo que los pescadores de Yoff-Tonghor cada vez encuentran más dificultades para cubrir sus cotas y tienen que desplazarse lejos a aguas más peligrosas. Estas dificultades, que han ido en aumento los últimos años, favorecen que cada vez más jóvenes desempleados se decidan por la pesca submarina como último reducto laboral, debido a la escasa inversión precisa para su desarrollo y a que aporta réditos económicos.
Sin embargo, no existe ninguna formación reglada para practicar este tipo de actividad y tampoco hay ninguna exigencia por parte de las autoridades para aprobar su práctica. La ONG Ecodesarrollo Gaia, en el desarrollo de sus proyectos en Yoff-Tonghor, detectó esta situación y los problemas de salud que sufrían los pescadores a causa de la mala práctica del buceo. Por ello, la ONG realizó una reunión en noviembre del 2017 con miembros de la Cofradía de Pescadores de Yoff con el fin de buscar soluciones a esta situación, en la cual se acordó la realización de este proyecto formativo.
Para su puesta en marcha, Ecodesarrollo Gaia contactó con Solidariedade Galega, ya que cuenta con profesionales especializados en medicina subacuática que ya habían realizado anteriormente proyectos de investigación, asistencia y formación a buceadores en otros países como Perú y Nicaragua.

El próximo sábado 3 de junio, dos especialistas en medicina subacuática, Salvador Fojón y Carlos García-Ramos, partirán desde A Coruña hacia Senegal para formar a pescadores locales en la prevención de riesgos laborales relacionados con la práctica del buceo. Los especialistas gallegos pertenecen a la ONG Solidariedade Galega que, en colaboración con Ecodesarrollo Gaia, realizan este año la tercera edición de este proyecto.
Allí impartirán, en la localidad pesquera de Yoff-Tonghor, un curso presencial interactivo que estará apoyado en material audiovisual y textos didácticos. Con él se pretende mejorar las condiciones de salud de los buceadores, instruyéndolos en las medidas de prevención de riesgos vinculados al buceo en apnea y con escafandra autónoma.
Para ello, los especialistas de Solidariedade Galega que participaron en las anteriores ediciones del programa elaboraron, tras la última expedición realizada en 2019, un libro que recoge la casuística específica de los buceadores senegaleses y las recomendaciones necesarias para practicar el buceo de un modo seguro y consciente. Este libro fue traducido a wolof, la lengua local que habla la población senegalesa pero en la que apenas existe material didáctico, resultando así un recurso de gran valor.
A la formación que impartirán este año Fojón y García-Ramos acudirán alrededor de 30 representantes de las distintas cofradías de pescadores que hay en la zona, quienes después trasladarán los conocimientos adquiridos al resto de sus compañeros. A día de hoy, se estima que en las zonas de Yoff, Ngor y Dakar hay cerca de 1.000 pescadores que utilizan el buceo como método para la obtención de su captura. En las dos anteriores ediciones del programa, se logró formar a cerca de 60 personas en esta materia, de las cuales el 92% carecía de formación y el 47% había tenido alguna vez un accidente buceando.
Las clases se realizan en la Escuela Coruña, un centro de desarrollo comunitario impulsado por Ecodesarrollo Gaia, que cuenta con el apoyo económico de la Diputación de A Coruña. Debido a la ubicación de esta localidad y a la tradición de sus habitantes, la pesca, el comercio y las industrias relacionadas con la actividad piscícola constituyen el sustento económico fundamental de su población, siendo el buceo una práctica en aumento en los últimos años debido a la creciente sobrepesca.
Sin embargo, el único aprendizaje que tiene esta población acerca de la técnica del buceo es por medio del boca a boca, habiendo una gran falta de conocimiento acerca de los riesgos y las graves consecuencias que puede provocar una mala práctica de esta actividad, así como falta del material necesario para desarrollarla con seguridad (profundímetro, manómetro, reloj y ordenador). Actualmente, existen en Yoff numerosos jóvenes con problemas físicos, principalmente de movilidad, causados por accidentes relacionados con el buceo, existiendo también algún caso de impotencia y varias personas fallecidas durante la actividad.
El salto de la pesca al buceo
En los últimos años, la sobrepesca y las malas prácticas de las flotas pesqueras industriales están agotando las pesquerías de las que depende la vida de muchos habitantes de África, por lo que los pescadores de Yoff-Tonghor cada vez encuentran más dificultades para cubrir sus cotas y tienen que desplazarse lejos a aguas más peligrosas. Estas dificultades, que han ido en aumento los últimos años, favorecen que cada vez más jóvenes desempleados se decidan por la pesca submarina como último reducto laboral, debido a la escasa inversión precisa para su desarrollo y a que aporta réditos económicos.
Sin embargo, no existe ninguna formación reglada para practicar este tipo de actividad y tampoco hay ninguna exigencia por parte de las autoridades para aprobar su práctica. La ONG Ecodesarrollo Gaia, en el desarrollo de sus proyectos en Yoff-Tonghor, detectó esta situación y los problemas de salud que sufrían los pescadores a causa de la mala práctica del buceo. Por ello, la ONG realizó una reunión en noviembre del 2017 con miembros de la Cofradía de Pescadores de Yoff con el fin de buscar soluciones a esta situación, en la cual se acordó la realización de este proyecto formativo.
Para su puesta en marcha, Ecodesarrollo Gaia contactó con Solidariedade Galega, ya que cuenta con profesionales especializados en medicina subacuática que ya habían realizado anteriormente proyectos de investigación, asistencia y formación a buceadores en otros países como Perú y Nicaragua.































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