El Balonmano Porriño empieza a perfilar su nuevo proyecto para la campaña 2015-16, un proyecto que si todo marcha según las intenciones de cuerpo técnico y directiva, presentará muy pocas caras nuevas. La apuesta porriñesa pasa por intentar mantener el grueso del grupo que tan buenos resultados ofreció la pasada temporada y en esas renovaciones se centran los esfuerzos de la junta presidida por Fernando Godoy. De hecho, hasta el momento sólo está confirmada la baja de Anabel Mateo, con la que el club ha decidido no contar para la campaña a punto de empezar, y las dos únicas incorporaciones previstas si no se produce ninguna salida más: Sara Gil, una jugadora que llega procedente del Castelldefels y que puede actuar como extremo izquierdo y en toda la primera línea, y Emma Prieto, una lateral derecho procedente del Balonmano Chapela.

Por eso, no podía ser de otra forma, y las dos primeras jugadoras en certificar su continuidad otra temporada más a las órdenes de Abel Estévez han sido las dos que tenían la oferta encima de la mesa desde hace más tiempo. Porque tanto Lorena Pérez como Sandra Costas sabían desde prácticamente unas horas después de haberse lesionado la campaña pasada que el Balonmano Porriño seguía contando con ellas y así se lo hizo saber la junta directiva. Como Lorena y Sandra también tenían intención de seguir defendiendo la camiseta rojilla, el acuerdo final fue muy sencillo y únicamente se dilató en el tiempo su firma.