La trampa

"La trampa" es una película de suspense y terror dirigida por M. Night Shyamalan, que promete atrapar al espectador desde el primer momento. La trama sigue a un padre (Josh Hartnett) y su hija adolescente (Saleka Shyamalan) que acuden juntos a un concierto de pop, solo para encontrarse en el centro de un suceso oscuro y siniestro.

Desde el comienzo, la atmósfera está impregnada de una tensión palpable, característica del estilo de Shyamalan. La relación entre el padre y la hija se desarrolla con autenticidad, destacando las interpretaciones de Hartnett y Saleka, quienes logran transmitir tanto la conexión emocional como la angustia creciente a medida que se despliega el misterio.

El reparto secundario, con Hayley Mills y Alison Pill, también aporta solidez al film, cada uno con actuaciones convincentes que añaden capas a la narrativa. Ariel Donoghue, aunque con menos tiempo en pantalla, logra dejar una impresión duradera. Sin embargo, a pesar de sus puntos fuertes, "La trampa" no está exenta de debilidades. Algunos giros de la trama, típicos de Shyamalan, pueden parecer previsibles para los seguidores habituales de sus películas. Además, el ritmo puede resultar desigual en ciertas partes, con momentos en los que la tensión decae antes de repuntar nuevamente.

La dirección de Shyamalan es precisa, utilizando hábilmente el espacio del concierto para crear un ambiente claustrofóbico y de inminente peligro. La banda sonora y la cinematografía trabajan en conjunto para mantener al público en el borde de sus asientos. La producción, a cargo de Ashwin Rajan, M. Night Shyamalan y Marc Bienstock, destaca por su capacidad de crear una experiencia inmersiva con un presupuesto limitado. La película no depende de efectos especiales ostentosos, sino que se apoya en una narrativa fuerte y actuaciones sólidas. En resumen,

"La trampa" es una adición digna al repertorio de Shyamalan, ofreciendo una experiencia de suspense tensa y emocional. A pesar de algunos momentos previsibles y un ritmo desigual, las actuaciones convincentes y la dirección precisa hacen de esta película una opción recomendable para los amantes del género.