El secretario general del PSdeG-PSOE en la provincia de Pontevedra, David Regades, ha criticado hoy la falta de previsión y gestión de la Xunta de Galicia ante la borrasca Kirk, al no suspender las clases en los centros educativos de la comunidad. Regades ha afirmado que “es inconcebible la falta de prevención y gestión del gobierno gallego a pesar de los avisos y alertas que se anunciaron hace días”.

Durante la mañana de hoy, cuando los niños y niñas se desplazaban a las escuelas, el dirigente socialista ha señalado que “ha sido un auténtico peligro para la movilidad por carretera, especialmente durante el período de mayor virulencia del temporal de lluvia y viento que afecta a todo el territorio”. También ha destacado el riesgo que esta situación representa para el transporte regular de pasajeros.

Regades ha calificado de “total irresponsabilidad” la falta de reacción de los responsables de la Xunta, quienes, a pesar del estado de la red viaria y el riesgo de salir a la calle, no decidieron cerrar los colegios ni suspender el transporte escolar. “No dieron ninguna explicación a las familias que no entendían por qué no se tomaron medidas”, ha añadido, enfatizando que “tenemos alerta roja en toda la costa de las Rías Baixas, cerca de 300 incidencias y hasta tres colegios del Salnés tuvieron que suspender las clases de forma unilateral ante el peligro existente”.

El secretario general del PSdeG-PSOE ha informado sobre el amplio número de incidencias en toda la provincia, desde las grandes ciudades hasta las más pequeñas. “Desde Vigo hasta Cuntis, Pontevedra, el Deza, el Val Miñor, O Condado o O Morrazo. En toda la provincia hay árboles caídos bloqueando las autopistas, calles anegadas, cortes eléctricos y techos y vallas que han volado, lo que ha provocado que los niños y sus familias se desesperaran ante un transporte escolar que no podía llegar a sus paradas y tuvieran que salir en vehículos particulares, incrementando así el riesgo en las carreteras”.

Por último, Regades ha exigido explicaciones inmediatas a la Xunta de Galicia “ante tal falta de prevención frente a un fenómeno atmosférico que estaba más que anunciado y que podría haber causado daños mucho mayores debido a la inacción del gobierno gallego”.