El Parlamento Europeo ha publicado la Encuesta postelectoral UE 2024, un análisis que revela las motivaciones del voto en las elecciones de junio y las principales preocupaciones de los ciudadanos europeos. Según los datos, el 42% de los encuestados citan el aumento de precios y el coste de la vida como la razón principal para votar, mientras que el 41% menciona la situación económica. Además, el 34% de los votantes se sintieron impulsados por la situación internacional y el 32% por la defensa de la democracia y el Estado de derecho.

En España, los resultados son similares: el 46% de los ciudadanos votó por la situación económica, y el 35% lo hizo motivado por la subida de precios. Otros temas relevantes incluyen la protección social y el acceso a la sanidad (32%) y la defensa de la democracia (31%). Los españoles que no votaron también indicaron que el coste de la vida (46%) y la situación económica (36%) serían los motivos que les habrían llevado a las urnas.

Roberta Metsola, presidenta del Parlamento Europeo, destacó que la alta participación registrada en las últimas elecciones refleja la voz de los ciudadanos y su deseo de que se aborden cuestiones prioritarias como el coste de la vida y la situación económica. Metsola aseguró que el Parlamento seguirá trabajando para tener en cuenta la opinión de los ciudadanos en la UE.

Optimismo hacia la UE y la democracia parlamentaria

A pesar de los problemas económicos, el apoyo a la UE sigue siendo elevado. El 65% de los ciudadanos europeos se muestra optimista sobre el futuro de la Unión, y el 48% mantiene una impresión positiva de ella. En el caso de España, el 72% de los ciudadanos se siente optimista sobre el futuro de la UE, con un 45% que tiene una imagen positiva de la misma.

La confianza en la democracia parlamentaria es notable, con un 42% de los europeos que considera positiva la imagen del Parlamento Europeo, el dato más alto de la historia. En España, este porcentaje es del 38%, y el 70% de los ciudadanos españoles desea que el Parlamento Europeo tenga un papel más relevante.

La participación en las elecciones de junio alcanzó el 50,74%, la más alta en 30 años. En España, la participación fue del 46,39%. El análisis de la encuesta sugiere que votar en las elecciones europeas se ha convertido en un hábito, con un 46% de los votantes afirmando que siempre lo hacen.