La nueva novela de Arturo Pérez-Reverte, es una obra que fusiona con maestría el género de la aventura con la reflexión sobre el amor y la guerra. Ambientada en el Egeo durante la Guerra Civil española, la historia sigue a un marino corsario, Miguel Jordán, cuya misión clandestina se ve alterada por un intenso y ambiguo triángulo amoroso con una mujer madura, un barón y el propio marino. A través de este relato, Pérez-Reverte nos sumerge en un mundo lleno de paisajes impresionistas, tensiones de guerra y pasiones desgarradoras, todo ello envuelto en la atmósfera del mar y la compleja moralidad de sus personajes.

El autor, conocido por su capacidad para tejer historias de acción y conflicto con una profunda carga emocional, nos presenta en esta novela a personajes que, como siempre en su obra, no son ni completamente buenos ni completamente malos. El mar, el amor y la guerra se entrelazan en un relato donde la traición y la desesperación se sienten casi palpables, pero también la belleza de la narración se impone. Con su estilo preciso y una intuición narrativa excepcional, Pérez-Reverte mantiene al lector atrapado entre giros de tensión y pasajes de reflexión.

Sin embargo, La isla de la Mujer Dormida también es un relato de despedidas y pérdidas, donde el autor, como en sus mejores obras, se aleja del moralismo y nos ofrece una mirada honesta sobre la condición humana. Las tensiones entre los personajes y sus deseos personales chocan con el telón de fondo de la guerra, haciendo que la novela no solo sea un relato de aventuras, sino también una profunda meditación sobre el amor, el tiempo y las decisiones irrevocables. Sin duda, un nuevo hito en la obra de Pérez-Reverte, que sigue demostrando su habilidad para crear narrativas complejas y emocionantes.