Durante las festividades navideñas, el cambio en las rutinas diarias, las sobrecargas de estímulos, el estrés por las compras y reuniones, y la alteración de los horarios pueden afectar el descanso y alterar los patrones de sueño. Para mejorar la calidad del descanso en esta época y llegar al nuevo año con energías renovadas, los expertos de Cigna Healthcare ofrecen siete recomendaciones clave:

1. Disfrutar de siestas reparadoras
   Durante las fiestas, las actividades sociales a menudo se alargan, lo que puede generar fatiga. Si es necesario, se recomienda hacer una siesta corta de 20 a 30 minutos. Esto mejora el estado de alerta sin interferir en el sueño nocturno. Mantener horarios consistentes para acostarse y levantarse, incluso en días festivos, también favorece un mejor descanso.

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2. Evitar comidas abundantes antes de dormir
   Las cenas navideñas suelen ser copiosas y tardías, lo que dificulta la conciliación del sueño debido al esfuerzo digestivo. Comer alimentos ricos en grasas y azúcares puede alterar el ciclo del sueño, afectando la fase de descanso profundo. Para un mejor descanso, se aconseja evitar las comidas pesadas al menos 2-3 horas antes de acostarse.

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3. Optar por una Navidad 0,0
   El alcohol puede inducir el sueño inicialmente, pero interrumpe las fases profundas del descanso. El tabaco, por su parte, es un estimulante que dificulta la relajación. Limitar el consumo de alcohol y tabaco, especialmente antes de dormir, es esencial para garantizar un sueño reparador.

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4. Crear un espacio de relajación
   El estrés de las festividades y la sobreestimulación por las luces brillantes pueden dificultar la relajación necesaria para dormir. Para contrarrestarlo, se recomienda crear un ambiente tranquilo, reduciendo la decoración navideña y los estímulos visuales en el lugar de descanso. Esto ayudará a relajar la mente y a facilitar el sueño.

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5. Evitar el jetlag social
   Las celebraciones sociales pueden alterar los ritmos biológicos, llevando a un desequilibrio en el sueño. Para evitarlo, se puede sustituir las cenas por comidas, adelantando las celebraciones a horas más tempranas. Además, es importante aprender a priorizar la salud física y mental, decidiendo si asistir a ciertos eventos es realmente necesario o si es mejor descansar.

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6. Mantener el orden para reducir el estrés
   El desorden generado tras una reunión festiva puede aumentar el estrés y dificultar la relajación antes de dormir. Dedicar unos minutos a organizar el espacio antes de acostarse crea un ambiente más sereno y favorece el descanso.

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7. Aprovechar el deporte como regulador del sueño
   La actividad física regular regula el ciclo circadiano y reduce el estrés. Durante las vacaciones, aprovechar el tiempo libre para hacer ejercicio, como caminar o correr, puede contrarrestar los efectos negativos de las comidas copiosas y el estrés. Sin embargo, es recomendable evitar hacer ejercicio intenso cerca de la hora de dormir para no afectar la capacidad de relajación.

Aplicando estos hábitos saludables durante las fiestas, se puede optimizar la calidad del descanso y recargar energías para enfrentar el nuevo año con fuerza.