La oposición acusa a Caballero de usar el puerto nodal como escudo político ante el ‘caso Guns’

La estrategia del alcalde de Vigo, Abel Caballero, para desviar la atención de la sentencia sobre el escándalo del concierto de Guns N’ Roses ha quedado en evidencia, según denuncia la oposición. La convocatoria de un pleno extraordinario sobre infraestructuras para el 13 de marzo ha sido calificada como una "cortina de humo" tanto por el PP como por el BNG, que denuncian el intento del regidor de manipular el debate público para esquivar sus responsabilidades.

El portavoz del PP en el Concello, Miguel Martín, ha criticado duramente la maniobra de Caballero, señalando que la defensa de Vigo como puerto nodal en la Red Transeuropea de Transportes ya fue aprobada por unanimidad a iniciativa de su grupo. “Nosotros extraemos consensos; Caballero solo propone crispación”, ha sentenciado. Para los populares, el alcalde está instrumentalizando una cuestión estratégica para la ciudad con el único fin de diluir la polémica por el fallido patrocinio del concierto en Balaídos, donde el Concello pretendió entregar dos millones de euros a la promotora mediante un concurso público amañado.

Por su parte, el BNG también ha denunciado la falta de credibilidad del regidor socialista. Su portavoz, Xabier P. Igrexas, ha recordado que Caballero vetó en diciembre una declaración institucional sobre el puerto nodal y ahora pretende utilizar este tema como cortina de humo. “Por más que intente huir del escándalo, no lo va a conseguir”, ha afirmado, insistiendo en que el fallo judicial ha evidenciado graves irregularidades en la gestión municipal.

Ambos grupos han coincidido en señalar que la convocatoria de este pleno, el tercero en apenas una semana, no responde a una preocupación real por las infraestructuras de la ciudad, sino a un intento desesperado del alcalde por tapar el ‘caso Guns’. Mientras el PP ha calificado la sesión como un “batiburrillo” diseñado para embarrar el debate político, el BNG ha denunciado el “cinismo olímpico” del regidor al apropiarse ahora de una reivindicación que él mismo bloqueó meses atrás.

Así, aseguran que Caballero, ha hecho del enfrentamiento su herramienta habitual, parece dispuesto a utilizar cualquier tema para evitar dar explicaciones sobre la gestión opaca de su gobierno. Sin embargo, la oposición ha dejado claro que no permitirá que se desvíe el foco de lo que consideran un "caso de corrupción política".