El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha confirmado la condena impuesta por la Audiencia Provincial de Pontevedra a dos hombres que agredieron brutalmente a dos jóvenes en Vigo, dejándolos semiinconscientes en la calle Hernán Cortés. Los hechos ocurrieron en la madrugada del 30 de enero de 2022, cuando los acusados, tras una discusión, golpearon repetidamente a las víctimas en un ataque que el tribunal ha calificado de especial violencia y abuso de superioridad.

El fallo judicial mantiene las penas de cinco años y tres meses de prisión para uno de los agresores y cuatro años y tres meses para el otro, como coautores de un delito de lesiones con deformidad y un delito leve de lesiones. Además, cada uno deberá pagar una multa de 360 euros. El TSXG ha aumentado la indemnización para una de las víctimas de 15.938 a 20.000 euros, al considerar que la sentencia inicial no tuvo en cuenta todos los conceptos indemnizables. La otra víctima recibirá 594 euros.

Los magistrados han rechazado los recursos presentados por los condenados y han mantenido la agravante de abuso de superioridad, ya que las víctimas, más jóvenes y en clara desventaja física, fueron atacadas sin posibilidad real de defensa. El tribunal también ha descartado aplicar la atenuante de embriaguez que alegaban los acusados. Asimismo, ha avalado el uso de testigos protegidos en el juicio, considerando justificado el temor a represalias por la extrema violencia de los hechos.

Según lo probado en el juicio, los agresores golpearon con puñetazos a una primera víctima hasta dejarla inconsciente en el suelo. Cuando el segundo joven intentó intervenir, fue perseguido, acorralado contra una pared y golpeado repetidamente. Incluso cuando ya estaba en el suelo, uno de los atacantes le propinó dos patadas en la cabeza antes de huir del lugar. La grabación de los hechos, que fue clave en el proceso, muestra claramente la desproporción de la agresión.

La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo. Este caso pone de manifiesto la contundente respuesta judicial ante actos de violencia callejera especialmente graves, donde se produce un claro desequilibrio entre agresores y víctimas. El aumento de la indemnización por parte del TSXG refleja además el reconocimiento del mayor daño físico y moral sufrido por una de las víctimas.