PROVINCIA
Intervienen una granada de la Guerra Civil en una vivienda de A Estrada
Los TEDAX retiraron el artefacto, que aún conservaba su carga explosiva, para su destrucción controlada.
Un artefacto explosivo de la Guerra Civil española fue intervenido esta semana por la Guardia Civil en una vivienda particular del municipio de A Estrada. El operativo, que requirió la actuación de los Técnicos Desactivadores de Explosivos (TEDAX), finalizó con la retirada segura de una granada de mortero para su posterior destrucción.
La intervención se inició tras recibir la Comandancia de la Guardia Civil el aviso de la presencia del objeto en una propiedad privada. Inmediatamente, se dio traslado al Equipo de Desactivación de Explosivos (EDEX) de Pontevedra, que se personó en el lugar.
Una vez en el domicilio, los especialistas confirmaron que se trataba de una granada de mortero con espoleta y con su carga explosiva intacta, a pesar de haber transcurrido más de ocho décadas desde su fabricación. Los técnicos procedieron a su manipulación controlada y a su retirada para eliminarla de forma segura en unas instalaciones autorizadas.
Las autoridades recuerdan que es crucial no tocar, mover ni manipular ningún objeto que se sospeche pueda ser explosivo. Aunque exteriormente parezcan oxidados o inofensivos, estos artefactos conservan todas sus propiedades explosivas y su funcionamiento décadas después. El protocolo de actuación exige alejarse del área y contactar de inmediato con la Guardia Civil, que activará a los especialistas correspondientes para gestionar el riesgo.

Un artefacto explosivo de la Guerra Civil española fue intervenido esta semana por la Guardia Civil en una vivienda particular del municipio de A Estrada. El operativo, que requirió la actuación de los Técnicos Desactivadores de Explosivos (TEDAX), finalizó con la retirada segura de una granada de mortero para su posterior destrucción.
La intervención se inició tras recibir la Comandancia de la Guardia Civil el aviso de la presencia del objeto en una propiedad privada. Inmediatamente, se dio traslado al Equipo de Desactivación de Explosivos (EDEX) de Pontevedra, que se personó en el lugar.
Una vez en el domicilio, los especialistas confirmaron que se trataba de una granada de mortero con espoleta y con su carga explosiva intacta, a pesar de haber transcurrido más de ocho décadas desde su fabricación. Los técnicos procedieron a su manipulación controlada y a su retirada para eliminarla de forma segura en unas instalaciones autorizadas.
Las autoridades recuerdan que es crucial no tocar, mover ni manipular ningún objeto que se sospeche pueda ser explosivo. Aunque exteriormente parezcan oxidados o inofensivos, estos artefactos conservan todas sus propiedades explosivas y su funcionamiento décadas después. El protocolo de actuación exige alejarse del área y contactar de inmediato con la Guardia Civil, que activará a los especialistas correspondientes para gestionar el riesgo.
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