El presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López, y el vicepresidente y responsable del Museo de Pontevedra, Rafa Domínguez, hicieron balance del regreso de la Bienal de Arte, que tras quince años de ausencia reunió a más de 125.000 visitantes en sus diferentes sedes durante 102 días de actividad. Ambos dirigentes calificaron la cita como un “éxito rotundo” y confirmaron que la Bienal “ha llegado para quedarse”.

Según el informe de impacto elaborado por la organización, el 85 % de la ciudadanía de Pontevedra apoya la celebración de futuras ediciones, mientras que la valoración global del evento alcanza un notable alto, con más de un tercio de las personas encuestadas otorgando sobresaliente o matrícula de honor. El estudio destaca especialmente el potencial del evento para promover la creación artística y la proyección exterior de la ciudad.

Luis López avanzó que ya se trabaja en la Bienal de 2027, cuya preparación comenzará formalmente en noviembre con la apertura del proceso de selección de los comisarios. “La Bienal de Arte de Pontevedra ha devuelto a la ciudad su papel como referente cultural en Galicia y en España”, subrayó.

El vicepresidente Rafa Domínguez detalló los principales datos de participación: 1.906 asistentes en el ciclo de artes vivas, que por primera vez llevó la Bienal a distintos municipios de la provincia; 157 espectadores en el ciclo de proyecciones Cine, Arte y Guerra; 398 personas en las Conversas con Artistas; y 1.718 visitantes en las 75 visitas guiadas. A estas cifras se suman 293 participantes en los talleres y actividades educativas. “La Bienal se ha convertido en el mayor evento cultural organizado nunca en Pontevedra, generando también un impacto económico positivo en el comercio y la hostelería”, señaló Domínguez.

Tanto López como Domínguez agradecieron la implicación de todas las personas que contribuyeron al éxito de esta 32ª edición: los comisarios Antón Sobral, Antón Castro y Agar Ledo, el equipo técnico del Museo de Pontevedra, las instituciones colaboradoras y los 125.000 visitantes que pasaron por las exposiciones. “El Museo vive uno de los mejores momentos de su historia reciente —destacó López—, con un proyecto cultural sensible a los grandes debates de nuestro tiempo”.

El presidente puso como ejemplo la exposición La era de las fábulas, que reflexiona sobre la inteligencia natural frente a la artificial; la llegada desde Argentina de A derradeira lección do mestre de Castelao, símbolo de memoria y paz; y el mensaje de la Bienal, centrado en el lema “Volver a ser humanos ante los demás”, que aborda los conflictos bélicos y los derechos humanos desde la mirada del arte contemporáneo.

“A través de los artistas, muchos procedentes de países en guerra, la Bienal ha sido un espacio de reflexión, memoria y esperanza”, añadió Domínguez. “Desde Pontevedra enviamos al mundo un mensaje claro: la cultura y el arte también son una forma de compromiso político y moral frente a la injusticia”.

En el cierre del balance, en el que participó también la directora del Museo de Pontevedra, Ángeles Tilve, los responsables provinciales destacaron que este regreso marca el inicio de una nueva etapa. “La Bienal no termina aquí; es un modelo consolidado que debe seguir creciendo para situar a Pontevedra entre los grandes referentes culturales de Galicia y de España”, afirmó Domínguez.

“El éxito de esta edición quedará pequeño cuando llegue el momento de hacer balance de la Bienal de 2027”, concluyó Luis López.