La madrugada del 12 de agosto se convirtió en una jornada de destrucción en las calles de Baiona, donde dos jóvenes de 22 y 17 años, según la investigación de la Guardia Civil, convirtieron vehículos aparcados en objeto de su diversión vandalica. Los ahora investigados por un delito de daños continuado habrían destrozado 15 turismos y 4 motocicletas, arrancando espejos, abollando carrocerías y volcando motos en un recorrido destructivo. Un policía local de Vigo que casualmente se encontraba en la zona fue testigo de los hechos y alertó inmediatamente a las fuerzas de seguridad.

La investigación, desarrollada durante casi dos meses, ha permitido a la Guardia Civil recoger hasta el momento 11 denuncias formalizadas por los afectados, aunque el número total de vehículos dañados asciende a 19. Los agentes han identificado además a un tercer implicado, menor de edad y residente en Madrid, cuyo caso se tramitará en la jurisdicción de menores. Las pesquisas determinaron que los presuntos autores actuaron de forma coordinada durante esa noche, causando daños sistemáticos en los vehículos aparcados en la vía pública.

El caso ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad del mobiliario urbano frente a este tipo de acciones vandalicas, así como la importancia de la colaboración ciudadana. Las autoridades recuerdan la disponibilidad del teléfono 062 para reportar actividades sospechosas, destacando que la rápida intervención del agente fuera de servicio fue determinante para identificar a los presuntos responsables de esta ola de destrucción que ha conmocionado a la localidad de Baiona