Galicia
Tráfico asume el control de 200 sistemas de vigilancia en carreteras gallegas
La Xunta transfiere a la DGT la titularidad de cámaras, paneles y estaciones de control en seis vías autonómicas estratégicas para unificar la gestión del tráfico.
La Dirección General de Tráfico (DGT) centralizará a partir de ahora la gestión de más de 200 elementos de control y monitorización dispersos por las principales carreteras autonómicas de Galicia. El decreto aprobado esta semana por la Xunta formaliza la transferencia de titularidad de estos sistemas, que incluyen cámaras de vigilancia, paneles de mensajería variable, estaciones meteorológicas y puntos de conteo de vehículos.
Esta reorganización responde a un acuerdo suscrito el pasado 30 de octubre entre la Comunidad Autónoma y el organismo estatal, que busca optimizar los recursos y unificar criterios en la gestión del tráfico. La cesión incluye además las redes de fibra óptica necesarias para la conexión de estos dispositivos y sus estructuras de soporte cuando su uso sea exclusivo para estas funciones.
Las carreteras afectadas por esta transferencia son seis ejes estratégicos: la AG-56 entre A Rocha y Brión, la AG-55 de A Coruña a Baio, la AG-31 que conecta la salida 217 de la A-52 con Celanova, la AG-11 de Padrón a Ribeira, la AG-41 entre Curro y Sanxenxo, y la AG-53/54 en O Carballiño. En total, se transfieren 94 cámaras de circuito cerrado, 58 paneles de mensajería variable, 10 estaciones meteorológicas y 42 estaciones de conteo.
La medida, lejos de representar una pérdida de competencias para Galicia, permitirá según fuentes de la Consellería de Vivenda e Planificación de Infraestruturas "una gestión más coordinada y eficiente de la seguridad vial". La Xunta mantendrá acceso a los datos generados por estos sistemas a través del uso compartido de las redes de fibra óptica, garantizando así la continuidad en el seguimiento del estado de la red viaria gallega.
El traspaso se hará efectivo en un plazo máximo de tres meses desde su publicación en el Diario Oficial de Galicia, momento en que la DGT asumirá todas las labores de mantenimiento, conservación y gestión de los elementos transferidos. Esta reorganización no afecta a la titularidad de las carreteras, que seguirá correspondiendo a la Xunta, ni interrumpe ningún itinerario de interés autonómico.
La operativa diaria de los conductores no se verá alterada por este cambio, pero sí se espera una mejora en la coordinación de incidencias y la gestión del tráfico a nivel estatal, al integrarse estos sistemas en la red global de la DGT. La medida representa un paso más en la modernización de las infraestructuras viarias gallegas y su adaptación a los nuevos sistemas de gestión inteligente del transporte.

La Dirección General de Tráfico (DGT) centralizará a partir de ahora la gestión de más de 200 elementos de control y monitorización dispersos por las principales carreteras autonómicas de Galicia. El decreto aprobado esta semana por la Xunta formaliza la transferencia de titularidad de estos sistemas, que incluyen cámaras de vigilancia, paneles de mensajería variable, estaciones meteorológicas y puntos de conteo de vehículos.
Esta reorganización responde a un acuerdo suscrito el pasado 30 de octubre entre la Comunidad Autónoma y el organismo estatal, que busca optimizar los recursos y unificar criterios en la gestión del tráfico. La cesión incluye además las redes de fibra óptica necesarias para la conexión de estos dispositivos y sus estructuras de soporte cuando su uso sea exclusivo para estas funciones.
Las carreteras afectadas por esta transferencia son seis ejes estratégicos: la AG-56 entre A Rocha y Brión, la AG-55 de A Coruña a Baio, la AG-31 que conecta la salida 217 de la A-52 con Celanova, la AG-11 de Padrón a Ribeira, la AG-41 entre Curro y Sanxenxo, y la AG-53/54 en O Carballiño. En total, se transfieren 94 cámaras de circuito cerrado, 58 paneles de mensajería variable, 10 estaciones meteorológicas y 42 estaciones de conteo.
La medida, lejos de representar una pérdida de competencias para Galicia, permitirá según fuentes de la Consellería de Vivenda e Planificación de Infraestruturas "una gestión más coordinada y eficiente de la seguridad vial". La Xunta mantendrá acceso a los datos generados por estos sistemas a través del uso compartido de las redes de fibra óptica, garantizando así la continuidad en el seguimiento del estado de la red viaria gallega.
El traspaso se hará efectivo en un plazo máximo de tres meses desde su publicación en el Diario Oficial de Galicia, momento en que la DGT asumirá todas las labores de mantenimiento, conservación y gestión de los elementos transferidos. Esta reorganización no afecta a la titularidad de las carreteras, que seguirá correspondiendo a la Xunta, ni interrumpe ningún itinerario de interés autonómico.
La operativa diaria de los conductores no se verá alterada por este cambio, pero sí se espera una mejora en la coordinación de incidencias y la gestión del tráfico a nivel estatal, al integrarse estos sistemas en la red global de la DGT. La medida representa un paso más en la modernización de las infraestructuras viarias gallegas y su adaptación a los nuevos sistemas de gestión inteligente del transporte.
























Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.20