La Consellería de Economía e Industria ha elevado una queja formal al Ministerio para la Transición Ecológica por la desigual distribución de la inversión en la red eléctrica. En la Conferencia Sectorial de Energía celebrada esta semana, la conselleira María Jesús Lorenzana exigió transparencia inmediata en los datos de reparto por comunidades autónomas y anunció la presentación de alegaciones al plan del Gobierno.

Lorenzana criticó que el borrador de planificación eléctrica presentado por el Ejecutivo central no se ajusta a las necesidades reales de la industria gallega. Un ejemplo flagrante, según la conselleira, es la provincia de Lugo, cuyo centro se queda sin ningún tipo de refuerzo en la red a pesar de la demanda existente en la zona.

En materia de inversión, la reclamación de transparencia es contundente. La Xunta solicita que se hagan públicos los detalles del repuesto de los 13.122 millones de euros destinados a nuevas operaciones. La administración gallega calcula que a su comunidad le corresponderían solo unos 350 millones, lo que representa un mero 2,7% del total. Esta cifra choca frontalmente con el peso económico de Galicia, que aporta en torno al 5,2% del PIB nacional. Además, la conselleira destacó que muchas de las actuaciones previstas para Galicia son heredadas de planes anteriores, lo que reduciría aún más la inversión netamente nueva.

El desfase entre la necesidad y la oferta planificada es abismal. Según los datos aportados por la Xunta, Galicia solicitó capacidad para más de 8.000 megavatios (MW) para atender los proyectos industriales en cartera. Sin embargo, el borrador del Ministerio solo contempla 1.899 MW, menos de una cuarta parte de lo requerido.

Ante esta situación, la conselleira avanzó que el Gobierno gallego presentará alegaciones este mismo mes. Su principal exigencia va más allá de la planificación concreta: reclamó una modificación de la Ley del sector eléctrico para que recoja y dé respuesta específica a las necesidades de la industria en comunidades como Galicia. El conflicto entre ambas administraciones queda así servido sobre la mesa, con la transparencia económica y el desarrollo industrial del noroeste como ejes del debate.