La magia en una taza de café volvió a ser la protagonista en la Cidade da Cultura de Santiago de Compostela. Este escenario acogió la undécima edición del Campionato de Baristas Down, un evento que reunió a dieciséis participantes de las entidades Down Compostela y Down Vigo para poner a prueba su destreza, formación y pasión por la hostelería. La conselleira de Política Social e Igualdade, Fabiola García, que asistió al acto, destacó que la cita demuestra cada año cómo “o esforzo, o talento e a ilusión superan todas as barreiras”.

Durante su visita, García felicitó a los concursantes, subrayando que el campeonato se ha consolidado como “un referente a nivel autonómico”. La responsable autonómica puso en valor el trabajo y la preparación que hay detrás de cada participante, remarcando la importancia de que la sociedad conozca “todo o que son capaces de facer con horas de práctica, ganas de aprender e de demostrar todo o que saben”.

El evento trasciende el mero carácter competitivo para convertirse en una potente ventana a la inserción laboral. La conselleira recordó que todos los participantes cuentan con una formación específica que, más allá de potenciar sus habilidades, les capacita para integrarse profesionalmente en el sector de la hostelería y, en concreto, en el oficio de barista. Este camino formativo es una pieza clave dentro de la estrategia de la Xunta para fomentar la autonomía personal y la empleabilidad de las personas con discapacidad.

En este sentido, García reiteró el compromiso del Gobierno gallego de seguir impulsando programas específicos a través de los centros autonómicos y en colaboración con las entidades sociales, con el objetivo claro de mejorar la inserción laboral del colectivo. El campeonato actúa así como un escaparate final de un proceso continuo de apoyo, capacitación y reconocimiento del talento.

La undécima edición del campeonato no solo coronó a los mejores baristas, sino que volvió a enviar un mensaje contundente a la sociedad sobre capacidad, superación y profesionalidad. Cada taza servida en el concurso simboliza el fruto de un trabajo constante y la prueba de que, con los apoyos adecuados, es posible construir una Galicia máis inclusiva, xusta e solidaria, tal y como destacó la conselleira. Un evento que, más que una competición, es una celebración del potencial humano y del derecho a una oportunidad laboral real.