La vivienda pública entra en una fase de aceleración en Galicia. La conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, compareció en el Parlamento para detallar la hoja de ruta de su departamento, anunciando que 2026 será el año del "despegue definitivo" de la vivienda protegida en la comunidad. La Xunta finalizará este año con más de 3.000 nuevas viviendas públicas en marcha y pondrá en construcción otras 1.000 el próximo año, además de comenzar a entregar las llaves de nuevos hogares en Pontevedra, A Coruña y Santiago de Compostela.

Allegue centró la estrategia en tres ejes principales: construcción de nueva vivienda, rehabilitación del parque existente y desarrollo de suelo residencial. Un esfuerzo que, según subrayó, requiere de la colaboración público-privada y del apoyo de los ayuntamientos. “La colaboración público-privada es fundamental para dar respuesta a la elevada demanda de vivienda; es un trabajo de todos”, afirmó la conselleira, quien agradeció a los concellos que han cedido suelo de forma gratuita. Hasta el momento, acuerdos con municipios como A Coruña, Pontevedra, Lugo, Ames o Vilagarcía de Arousa, entre otros, permitirán construir un total de 700 viviendas en esos terrenos.

La hoja de ruta para el próximo año incluye medidas innovadoras. Una de las más destacadas es un programa piloto en Ourense para adquirir y adecuar bajos comerciales desocupados y convertirlos en viviendas con calificación permanente, una ampliación de la normativa ya modificada para facilitar la conversión de locales. Además, se regularán y potenciarán los alojamientos compartidos protegidos, una solución habitacional dirigida especialmente a los jóvenes, con proyectos ya en marcha en Santiago, Vigo y Lugo.

La rehabilitación recibirá un impulso específico para el medio rural, con una nueva línea de ayudas que podrá alcanzar los 30.000 euros y cubrir hasta el 75% del coste de la obra. También se reforzarán las actuaciones en las Áreas de Rehabilitación Integral (ARI), incluidas las de la Ribeira Sacra y el Camino de Santiago.

En el ámbito de la simplificación administrativa, Allegue destacó medidas ya implementadas como las certificaciones ECCOM —que agilizan trámites al tener la misma validez que los informes técnicos municipales— y la eliminación de l

El compromiso con los jóvenes se materializa en varias líneas: el 40% de los nuevos hogares públicos en alquiler y el 25% de los de venta se reservarán para menores de 36 años. También se aumentará el presupuesto de las ayudas a la compra y se reforzará el Bono Alugueiro Mocidade, con una inyección de 11,4 millones de euros de fondos estatales que permitirá que unos 2.000 jóvenes reciban la ayuda este mismo mes de diciembre.

La colaboración con el sector privado es otro pilar clave. La Xunta triplicará hasta los 15 millones de euros las ayudas a promotores y cooperativas en 2026, tras una línea que ya permitió impulsar 559 viviendas protegidas. Además, se modificará la normativa para permitir incrementar la edificabilidad hasta un 20% en promociones donde al menos el 80% sea vivienda protegida.

En el capítulo de la innovación, Allegue anunció que en 2026 se aprobará el Plan Director de las Técnicas Industrializadas en Galicia, fruto de un convenio con el Clúster de la Construcción. Actualmente, ya hay 400 viviendas públicas en construcción utilizando estos métodos, que acortan plazos y alivian la escasez de mano de obra.

Por último, la Estrategia de Desarrollo de Suelo Residencial contará con 18 millones de euros el próximo año, con el objetivo de habilitar suelo para 25.000 viviendas, de las cuales el 80% serán protegidas. Ya se están tramitando Proyectos de Interés Autonómico en 11 ámbitos de ciudades como Vigo, A Coruña, Santiago, Lugo, Pontevedra y Ourense. El objetivo final de la legislatura sigue siendo claro: duplicar el parque público de vivienda, pasando de 4.000 a 8.000 hogares.