La calle Pérez Leirós, una vía céntrica de la villa de O Porriño, se ha convertido en un punto conflictivo y peligroso para la movilidad peatonal, según denuncian los vecinos. La combinación de un desnivel pronunciado, aceras inadecuadas y falta de mantenimiento está obligando a las personas a caminar por la calzada, asumiendo riesgos innecesarios.

Preocupados por esta situación, un grupo de vecinos se reunió recientemente con el BNG de O Porriño para trasladar sus quejas. Según han confirmado a Xornal21.es algunos de los residentes, el principal problema radica en la dificultad de acceso a viviendas y bajos comerciales, agravada para personas con movilidad reducida o quienes se desplazan con carritos de bebé.

El problema se intensificó tras una modificación realizada por la Concellería de Obras para acceder a un portal, que incrementó el desnivel existente. Este cambio ha tenido consecuencias directas: los bajos comerciales de la vía quedan a un nivel tan dispar con respecto a la acera que se limita gravemente su uso potencial, afectando a la actividad económica en la zona.

A esta situación estructural se suma un evidente abandono en el mantenimiento. En la franja izquierda de la vía, la maleza crece sin control, creando un entorno aún más inseguro para el tránsito peatonal. "Las personas van por la calzada para no resbalar en la acera", explicó Pedro Pereira, Portavoz del BNG de O Porriño.

En declaraciones a este digital, Pereira criticó la gestión del actual gobierno municipal: "Estamos ante un nuevo caso de intervención que no soluciona nada o incluso empeora la situación inicial. Hacer obras no solo se trata de romper y meter cemento. Es necesario un estudio serio y riguroso que solucione los problemas. Ese rigor es el que le falta, como ya lleva demostrado reiteradamente, al actual gobierno del Concello de O Porriño".

Los vecinos han puesto en conocimiento de la Concellería de Obras la situación, aunque de momento no se ha comunicado ninguna solución concreta. La reivindicación vecinal pone el foco en la necesidad de planificación urbana accesible y segura en el centro de la villa, un derecho básico que, alegan, no está garantizado en la céntrica calle Pérez Leirós.