La ilusión de la Navidad, con su planeamiento, tradiciones y la búsqueda del regalo perfecto, tiene en España unos claros responsables: las madres. Un barómetro sobre los hábitos navideños pone cifras a una realidad extendida, evidenciando que la carga mental y organizativa de las fiestas recae de forma abrumadora sobre las mujeres, dejando al descubierto la falta de corresponsabilidad en los hogares.

Según el III Barómetro de Navidad de Cheerz, basado en una encuesta a 1.000 personas con representatividad nacional, el 90% de las madres españolas afirma encargarse no solo de las tareas navideñas, sino que además disfrutan planificándolas y buscando el regalo ideal. Este perfil organizado contrasta radicalmente con el de muchos padres. Frente a ese 90% de mujeres implicadas, uno de cada cuatro padres (el 25%) o delega la compra de regalos en otras personas o simplemente improvisa cuando llega el momento.

El estudio desglosa que solo un 9% de las mujeres afirma improvisar o dejar los preparativos para última hora, y un 1% los delega. Entre los hombres, sin embargo, el 20% reconoce improvisar y un 5% directamente no se encarga de los regalos. Esta disparidad subraya cómo "la magia de la Navidad" sigue siendo, en gran medida, un trabajo no remunerado y no compartido realizado por ellas.

La investigación también señala que, a pesar de su rol central, las mujeres son frecuentemente las grandes olvidadas. Un 11% de las encuestadas considera que los demás no se esfuerzan lo suficiente a la hora de hacerles un regalo, ni dedican el tiempo y la atención necesarios. Cuando se pregunta quién les hace los mejores regalos, el 44% de las mujeres menciona a su pareja, el 28% a sus hijos y el 13% a sus padres.

La perspectiva masculina es diferente. El 63% de los padres afirma que su pareja es quien les hace los mejores regalos, el 16% cita a sus hijos y el 10% a sus padres. Esta diferencia se repite al analizar el foco del esfuerzo a la hora de regalar: ellas priorizan claramente a sus hijos (62%) y después a su pareja (24%). Ellos, en cambio, se esfuerzan más en su pareja (57%) que en sus hijos (33%), una dinámica que, según se intuye del estudio, podría deberse a que la responsabilidad hacia los niños ya está asumida mayoritariamente por la madre.

Los datos del barómetro pintan un panorama donde la corresponsabilidad sigue siendo una asignatura pendiente en la Navidad española, perpetuando roles tradicionales que concentran en las mujeres la tarea de hacer realidad la ilusión de las fiestas para el resto de la familia